La violencia es un problema filosófico de gran interés, pues vivimos en un mundo altamente conflictivo, afectado por la metafísica violenta del liberalismo y sus pretensiones de universalidad tanto ética, económica como política.
La violencia da origen a mundos históricos; la violencia en el mundo civil es fuente (ontológica) para el establecimiento de derechos para grupos oprimidos, sea por razones de religión, origen racial o marginación económica,. La violencia es tan filosófica como cualquier otro tema que despierta la admiración y la conmoción del mundo del hombre. Estudiar la violencia y pensarla en términos filosóficos no asocia al filósofo con ella.
La Coalición felicita a la UNA-Puno por una iniciativa filosófica de genuino interés social y humano en el Perú.
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